Pensar en Temuco, pensar en Wild
Hace casi exactos dos años, en marzo de 2021, Juan Alberto Arriagada (42) decidió formalizar su negocio cervecero. Amante de la cerveza, llevaba un tiempo como homebrewer, con una olla de 20 litros, produciendo en su casa y regalando su producto a su círculo cercano. Sin embargo, después de darse cuenta de que gustaba y de que el producto era bueno, decidió lanzarse con todo y creó su propia marca, Wild, la cual hoy trabaja junto a sus dos hijos, de 19 y 17 años.
Para empezar, compró equipos nuevos e instaló su planta, que hoy tiene una capacidad de producción de mil litros mensuales, en Villa Las Tranqueras, en el sector norte de Temuco, en la Región de La Araucanía. Y aunque Arriagada asegura que el crecimiento del negocio fue más rápido del que esperaba, se encontró con una barrera que todavía intenta derribar: en la ciudad en la que está ubicado es difícil lograr que la cerveza artesanal entre a locales como bares y restaurantes.
“En Temuco fue muy difícil partir vendiendo cerveza. Hay un nicho muy cerrado y la gente prefiere la cerveza tradicional, la industrial. Pero empecé a llevar a Valdivia por mi otro trabajo como ingeniero en administración y Wild empezó a crecer en ventas”, cuenta Arriagada, quien actualmente vende botellas y barriles de sus tres estilos, lager, scottish ale y porter, en Temuco, Valdivia, Melipeuco y Villarrica.
Pese a haberse expandido a más ciudades, incluso a otra región, su foco sigue siendo Temuco: “Yo quiero seguir creciendo. Quiero potenciar la cerveza y potenciarla en la región. Así como en la Región de Los Ríos está potenciada la cerveza artesanal y si tú piensas en una cerveza de esa región, específicamente de Valdivia, piensas en Kunstmann —porque es la más grande—, en Cuello Negro y en Bundor, algún día espero que si tú piensas en una cerveza de Temuco, de mi ciudad, pienses en Wild”.
TRAZABILIDAD CLARA
Para hacer de su negocio un mejor negocio y no tener que invertir constantemente en barriles para reemplazar los que se pierden, Arriagada decidió integrar tecnología a su proyecto y usar MyTrack, el software que ofrece BRIGHT para que las marcas tengan toda la información sobre sus barriles a un solo click.
“Me ha ayudado mucho a identificar dónde están los barriles y en qué condiciones. Ya no se nos pierden, porque se nos perdieron varios en un principio y el costo es elevado, es una inversión que cuesta hacer. Entonces hoy día, tener esa trazabilidad clara, nos ha ayudado bastante. El programa es súper bueno, he tenido una muy buena experiencia con él”, concluye Arriagada.